Thursday, March 09, 2006

Más historias

He pensado que a lo mejor es mejor el no publicar de golpe todas las entradas.. pero.. que más da.. De todas maneras no sé cuándo tendré tiempo de nuevo para poder publicar cómo manda la fuerza-universal-no-consciente-de-sí-misma (bueno, o a lo mejor sí-consciente-de-sí-misma) de genero indefinido.. De cualquier manera espero vuestros comentarios.. ¡Marchando otra dosis!

Historias. Es lo que busco normalmente. Es lo que me hace levantarme por las mañanas y sonreír al mundo, agradecido. Siempre hay una historia que contar o que escuchar. En los libros, las canciones, las películas, los anuncios de la tele y la prensa. Siempre hay historias; en nuestras vidas, nuestras aburridas vidas, siempre hay una historia que cambie el gris. Pudo ser un día que soñaste con más vividez que nunca que volabas, caías, luchabas a espada, combatías a un ejercito y ganabas, hacías el amor con alguien que no conocías (pero aun así conocías perfectamente). Cualquiera de estas cosas te traerá una sonrisa a la cara; también están las otras historias, en las que morías a caballo en una batalla que no te pertenecía, en las que quedabas tú sólo sobre una montaña de cadáveres y escuchabas el grito de guerra de los enemigos cuando, como la lluvia, caían sobre ti, o en las que eras, sencillamente, una persona honrada, que amabas con toda la honestidad y la pureza, ya sabes, esas historias que te hacen enrojecerte de vergüenza e hinchar el pecho de orgullo, como un barril. También están las otras, en las que te levantas sudoroso o asustado, sin saber porqué. Aquellas en las que te levantas llorando y te encogen el corazón de dolor al recordarlas. Y todo esto, sólo en unas horas de sueño. Cuántas más cosas no habrá en el resto del día y las dejas pasar por alto. Lo que ha pasado en tu vida y lo que ha pasado en las de los demás (no sólo lo cierto, sino lo que imaginas que les ha pasado y les ha llevado hasta, por ejemplo, coger el mismo bus que tu). Cada historia, real (con sus perfiles marcados, brillante, tan definida que parece irreal) o imaginada-soñada (con sus formas difusas, suaves, tan delicadamente borrosas que te hace pensar que si las recuerdas con más fuerza las borrarás y las harás desaparecer), es lo que me hace levantarme por las mañanas. Nunca me arrepentiré lo suficiente de dormir borracho o de olvidar cosas. Nuestra vida, nuestro hilo del Destino que tejen las Parcas se entrelaza con otros muchos. Cuantos más enredos puedas ver, mejor el aprecias la forma del tapiz que se teje por manos invisibles, nudosas y expertas. Le da una nueva belleza al mundo que te permite imaginar la historia que hay detrás del tapiz. No es que le de un sentido (los sueños y las cosas de los dioses olvidados raramente pueden tener un sentido), pero te da algo que hacer mientras esperas la muerte, para poder cruzar la laguna Estigia con el barquero, Caronte, y que te lleve a beber de la fuente de la Mnemosine, que nos hará olvidar todo para que nada duela más, para poder volver a disfrutar de todas las historias de nuevo. Porque como te decía, eso es lo que me hace levantarme por las mañanas y sonreír al mundo, agradecido. Que siempre hay una historia que contar o que escuchar.

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